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El Círculo de Viena
En los locos años 20, no todo el mundo se dedicaba a bailar charleston y especular en bolsa. En la Universidad de Viena se juntaron unos cuantos supercerebritos, la mayoría de ellos matemáticos y físicos, algún que otro filósofo y científicos sociales. Todos compartían un interés común: La Filosofía de la Ciencia, y un odio común: La Metafísica Académica, que procedente de Alemania, asfixiaba al empirismo. Por allí andaban entre otros muchos Carnap, Kaufmann, Godel, Hempel, Ayer…
Estos pensadores seguían la tradición positivista de Hume y como pretendían incluir a esta perspectiva los descubrimientos de la lógica moderna, denominaron a la corriente de pensamiento que generaron como Positivismo Lógico.
Centremos pues el tiro, en qué consiste exactamente el Positivismo Lógico. Se trata de una corriente de pensamiento caracterizada por los siguientes aspectos:
- Un empirismo total. El cual se apoyaba en los recursos de la lógica moderna y en los logros de la física moderna. Desde el punto de vista metodológico las ciencias empíricas están basadas en la inducción
- Un empleo de la lógica-simbólica. Usada como un instrumento para deslindar entre distintos lenguajes y sus relaciones tanto en sus aspectos formales (sintaxis-lógica) como en su contenido o referencias a lo real (semántica).
- Un rechazo a la metafísica y a la teología. En línea con el pensamiento de la Ilustración, los pensadores del Círculo de Viena (ya formados en el escepticismo) fomentaron un repudio hacia la metafísica por estar fuera de lo que era concebido como lo “sensible” y empírico. La acusación básica contra la metafísica estaba centrada en que sus proposiciones carecían de significado. Es decir, las proposiciones de la metafísica carecen de sentido en virtud de que no tienen relación con los hechos; ya que éstas no están construidas en base de proposiciones elementales.
- Una restricción del dominio de la filosofía. El espacio de acción de la filosofía fue casi literalmente reducida a la tarea de eliminar sus propios problemas.
- Un fisicalismo: Todos los enunciados empíricos pueden ser expresados en el lenguaje de la física. Este fue el fundamento teórico a favor de la unidad de la ciencia. Esta propuesta inicial de un lenguaje fisicalista estuvo ligada a los cambios dramáticos de la física en las tres primeras décadas del siglo XX originados principalmente en la teorías de la relatividad de Einstein y en la Mecánica Cuántica.
Orígenes e Inspiración
Las raíces del Positivismo Lógico las podemos encontrar en dos sitios fundamentalmente:
- La concepción de la verdad de Aristóteles, el cual establecía una correspondencia entre el decir y el ser: decir las cosas como son era sinónimo de discurso verdadero. El Círculo de Viena reformuló esta concepción, y estableció ahora que la concepción de la verdad era una correspondencia entre proposiciones y hechos. Es decir, los enunciados científicos pueden ser verificados en la medida que se correspondan con los hechos o que las observaciones empíricas han de concordar con las predicciones de la ciencia.
- El positivismo o empirismo clásico de Hume y Comte. La tesis fundamental de todo empirismo es que la única fuente de conocimiento es la experiencia sensible.
Además, podría decirse, que El Círculo de Viena tuvo cuatro influencias evidentes. Desde el punto de vista filosófico, el neopositivismo de Ernst Mach, quién negaba todo tipo de elementos a priori en las ciencias empíricas, y como no, el Tractatus Logicus Philosophicus de Wittgenstein, donde se vincula la tradición empirista con la nueva lógica-matemática.
Pero también hubo una influencia de carácter histórico. Las contribuciones de Einstein para la compresión de la estructura del espacio-tiempo y de la gravitación, y la de la Mecánica Cuántica para la comprensión de la estructura atómica y nuclear. La revolución de la Física Cuántica fue interpretada como demostración del carácter analítico de la ciencia y de la fuerza del pensamiento riguroso orientado hacia los hechos observables y hacia los mecanismos de comprobación.
Por último, una influencia de tipo instrumental vino determinada por las herramientas de la lógica matemática, consolidada unos veinte años antes en los «Principia Mathematica» de Russell y Whitehead y profundizada por los lógicos polacos y los trabajos de Hilbert, ofrecieron al Círculo de Viena un importante aparato para traducir datos de conocimiento empírico a un lenguaje preciso, riguroso e inequívoco que concibieron como modelo del lenguaje científico
Las Tesis del Círculo de Viena
El Círculo de Viena desplazó el foco de observación desde la conciencia individual (la orientación seguida desde Descartes, en Kant y en el idealismo alemán) al lenguaje. Y partir de allí, junto con otros elementos ya mencionados, el empirismo o positivismo lógico construyó una doctrina sobre la estructura lógica del conocimiento científico. De esta manera, el Círculo de Viena distinguió, o al menos propuso distinguir, la ciencia de la metafísica (y de cualquier otro conocimiento) basándose en un criterio epistemológico de significatividad cognoscitiva. Esto le permitió “al positivismo lógico aplicar radicalmente la navaja de Ockham, descartando del pensamiento científico numerosos conceptos y trabajos llevados a cabo por la filosofía especulativa.
El Círculo de Viena produjo cuatro tesis bien definidas que interpretan el conocimiento científico, a saber:
- El criterio de demarcación (Principio de Verificación)
- Lo que esencialmente distingue al conocimiento científico frente a otros tipos de conocimiento es su verificabilidad con respecto a los hechos constatables.
- Un enunciado científico aceptable será sólo aquél que resulte verdadero al ser comparado con los hechos objetivos. Así, la verificación empírica constituye el criterio específico de demarcación entre ciencia y no-ciencia.
- Para concretar esta norma es necesario un método, un criterio de significatividad, que permita establecer si determinada proposición es o no verdadera. Se buscaba desesperadamente discriminar con certeza absoluta la ciencia de la pseudo-ciencia.
- Pero este principio funciona solamente en la medida en que se conceda una autoridad particular a una clase específica de proposiciones empíricas cuya certeza no puede ser cuestionada: debe establecerse una fuente segura que nos proporcione conocimiento real, como fundamento epistemológico sobre el cual construir el edificio de la ciencia.
- El lenguaje lógico
- Los enunciados serán científicos sólo si pueden ser expresados a través de símbolos y si pueden ser relacionados entre sí mediante operaciones sintácticas de un lenguaje formalizado (independiente de su contenido significativo).
- Los enunciados científicos estarán dotados de una expresión sintáctica, formal o simbólica, por una parte, y de una correspondencia semántica, significativa o empírica, por otra parte.
- La base de esta correspondencia estará, por supuesto, en los enunciados observacionales más concretos dados por la experiencia. Esto es lo que se conoce como lenguaje «fisicalista»
- La unificación de la ciencia
- Todo conocimiento científico, cualquiera sea el sector de la experiencia sobre el cual se proyecte, estará identificado (construído, expresado, verificado…) mediante un mismo y único patrón.
- En un sentido epistemológico y metodológico, no se diferenciarán entre sí los conocimientos científicos adscritos a distintas áreas de la realidad. Ya que la realidad constituye globalmente una sola estructura compacta y coherente (ordenada), también el conocimiento científico de la misma debe resultar, en definitiva, una misma construcción igualmente integrada.
- En virtud de ello, existe una única Filosofía de la Ciencia, es decir, un único programa de desarrollo científico para toda la humanidad. La Lógica y la Matemática serán el esquema básico para toda expresión comunicacional ‘verificable’ de la ‘ciencia’.
- La inducción probabilista.
- La producción de conocimiento científico comienza por los hechos evidentes susceptibles de observación, clasificación, medición y ordenamiento. Sigue con la detección de regularidades y relaciones constantes y termina con las generalizaciones universales formuladas mediante leyes y teorías.
- Sin embargo, dado que el conjunto de todos los datos de una misma clase suele escapar a las circunstancias de tiempo/espacio del investigador entonces el proceso de generalización de observaciones particulares tiene que apoyarse en modelos de probabilidad, base de los tratamientos estadísticos utilizados actualmente en todas las áreas de investigación.
- De acuerdo al concepto de probabilidad, es posible inferir leyes generales a partir de un subconjunto o muestra representativa de la totalidad de los casos estudiados. Esto implica que el conocimiento científico debe tomar en cuenta ciertos índices de error y ciertos márgenes de confiabilidad previamente establecidos.
Cerrando el Círculo
A pesar de su impacto inicial y de su enorme influencia, las tesis del Círculo de Viena se vieron sometidas a crítica por otros filósofos de la ciencia que, aunque coincidían en los aspectos básicos ya planteados, disentían en otros más específicos (Quine, Putnam, Toulmin, Hanson, Nagel, etc.).
Los mismos integrantes del Círculo fueron haciendo revisiones y rectificaciones propias (Carnap, especialmente, Hempel y otros). En los últimos desarrollos del Círculo de Viena se acaba apelando a una lógica inductiva, que a su vez Carnap intentó axiomatizar en forma de cálculo lógico. El empirismo lógico acabó confluyendo en una afirmación de la inducción como el método principal de las ciencias empíricas. La lógica inductiva permitiría fundamentar el criterio de significación empírica, inicialmente basado en la verificabilidad observacional, y finalmente en el grado probabilístico de confirmación de una determinada hipótesis.
Entretanto, y desde otras posturas, se hacían críticas de principio a las tesis del Círculo de Viena y de sus epígonos. Así sucedió, en particular, con Popper, quien va a orientar la metodología científica en un sentido muy distinto.
De estas críticas y revisiones nació una ulterior interpretación del conocimiento científico que respetaba las bases del Círculo, pero que imponía modificaciones y correcciones de interés. En esencia, se abandonó el «empirismo ingenuo» implícito en las tesis iniciales; se reajustó el concepto de «reglas de correspondencia» entre los planos teórico y observacional. Se hizo más flexible el concepto de «reducción» de unas teorías a otras y se amplió el modelo de las teorías científicas para dar cabida a otras opciones válidas. Todas estas revisiones y ajustes conformaron una diferente interpretación que se divulgó bajo el término «Received View» o «Concepción Heredada» que, en pocas palabras, consistió en una versión menos radical y más reflexiva de las tesis del Círculo de Viena.
Con esta entrada se acaba el capítulo relacionado con la Historia del Pensamiento sobre el Método. En Filosofía de la Ciencia tienes disponible todas las entradas publicadas hasta el momento.
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OK, pues borrón y cuenta nueva.
No se cómo es tu familia y tu entorno, pero mi madre tuvo que dejar la escuela cuando aprendió a leer y a escribir, porque mi abuelo, que por lo demás era una bellísima persona, consideraba que eso era ya mas que suficiente, lo que necesitaba era aprender a cocinar, y a coser y a llevar una casa. Mi abuela directamente era analfabeta. Yo soy ingeniera
Si hace un par de décadas, la mayoría de las mujeres ni podían acceder a la educación, y sólo unas pocas privilegiadas podían aspirar a ser enfermeras o maestras, explícame cómo podían llegar a ser científicas.
Ahora mira en las universidades, las mujeres ya son mayoría en la mayoría de las carreras tradicionalmente masculinas. En un par de generaciones habrá más mujeres científicas que hombres, es por pura estadística. No hay ningún condicionamiento genético para estas distinciones que planteas, es pura imposición social.
Es mucho más «femenino» que una chica sea enfermera a que sea ingeniera de obra civil. El mismo concepto de femenino que todos seguimos manejando con tanta naturalidad, incluidas por supuesto las mujeres, te condiciona a unos roles de los que son muy difícil ya no escapar, sólo despuntar un poco. Queda aún mucho camino para que el concepto de ser humano sea el que aplique a las relaciones, y no el de sexo.
Respecto a lo que comentas sobre las mujeres con las que hablas…lo mismo deberías plantearte de qué tipo de mujeres te rodeas 😉
Un saludo
Dixi est…
Gracias y perdona, no era mi intención molestar.
Bueno, esta mañana cuando me he levantado seguía siendo mujer…no se, lo mismo debería pasarme por el baño a ver si ha habido algún cambio…
Me vas a permitir que no te conteste, tus comentarios los encuentro bastante ofensivos y fuera de espacio y de tiempo.
Ayer asistí a una curiosa escena.
Andaban por la calle 2 mujeres y un hombre. Las mujeres llevaban cara de fastidio y dos pasos por detrás andaba el hombre inmerso en una detallada explicación de las 4 fuerzas.
Estoy cansado de hablar con mujeres y salvo contadas excepciones, las ciencias no les interesan en absoluto. Sin embargo tienen una facilidad increíble para dar credibilidad a charlatanes homeopáticos y místicos de todas clases.
No nos engañemos, los blogs de ciencia, salvo los que tratan temas de salud, los hacen y los leen hombres en un 90 %.
La ciencia parece cosa de hombres. ¿Había mujeres en aquella Universidad de Viena? ¿Tenemos razón nosotros, o hay algo que ellas saben y a nosotros se nos escapa?
Ya sé que me va a contestar un hombre. ¿Alguna mujer se anima a contestarme?
Gracias a los dos,
sobre el spam en este blog mejor que os contesten los cuentistas, pero en el mio, que tiene bastantes menos visitas, también aparece spam demasiado a menudo, y lo que es más grave…hasta publicidad!!!!, y no puedes hacer nada.
Yo tengo instalado akismet y aún así, el spam se cuela 😦
Muy buen articulo. Perdonad por el off-topic, pero queria preguntar que le pasa al foro? Esta infectado de spam por todas partes… 😦
El foro va a sufrir una remodelación inmediata y una reactivación, pero estamos hasta arriba de curro ahora mismo y hasta navidades no se harán los cambios. El spam se va a limpiar de inmediato.
Un saludo.
Muy interesante. Gracias
Como siempre un placer, muchas de nada
Impresionante entrada, MUCHAS GRACIAS
Pingback: Introducción al Positivismo Lógico | ForoProvincias.Com
Filósofos y científicos buscan lo mismo, desde diferentes puntos de vista, con diferentes metodologías y diferentes objetivos, pero lo mismo. Ambos buscan una explicación de la realidad. Una sinergia, simbiosis o como quieras llamarlo sería una postura mucho más productiva. El trabajo en equipo siempre es más eficiente que la guerra.
En sus orígenes la ciencia no existía como tal, era denominada filosofía natural…no descarto que en sus finales, filosofía y ciencia se den de nuevo la mano desde el otro lado. De hecho, la mecánica cuántica fue un gran paso en este sentido, porque ya no era todo «tan claro y percibible» como lo era antes, y las implicaciones filosóficas son evidentes.
Según el enfoque que utilices, un axioma y un dogma son equivalentes. Me gustaría mucho que me aclararas tu comentario porque no acabo de entender a qué filósofos metidos a científicos te refieres y a que confusión…
De acuerdo «Filotecnóloga». Y dada la confusión actual provocada por filósofos metidos a científicos, diría que «axiomática, mas no dogmática».
Pingback: Introducción al Positivismo Lógico
Todas las ciencias son axiomáticas, no puede ser de otra forma, y evolucionan cambiando de paradigma, es decir, echando por tierra o simplemente matizando las teorías anteriores. La verdad es un concepto más filosófico que científico.
En el siglo XIX parecía que la mecánica de Newton y el electromagnetismo de Maxwell, explicaban todos los fenómenos físicos.
Lamentablemente con el problema de M&M y Planck-Einstein, esa posición absoluta se desintegró.
La física es axiomática, y lo que hoy parece una verdad inamovible, mañana es un error conceptual, la idea de que en el presente o el futuro no será así, es un concepto de la «escoria científica». Y bajo el aparente método científico del momento, se censuró al discordante.