Hoy nos vamos a parar a pensar sobre una pregunta que estoy seguro que más de una vez te ha dejado sin sueño.
Si sumerjo en aguja una piedra pómez durante 30 segundos, ¿llegará el agua hasta el centro de la piedra?
La respuesta evidente es que si la piedra es lo suficientemente porosa el agua llegará a su centro y si no es lo suficientemente porosa el agua no llegará a su centro.
Esa, sin duda, es la respuesta evidente, la menos evidente es que este problema dio origen a un campo de estudio que conocemos como:
PERCOLACIÓN
Esta teoría es interesante por diversos motivos de entre los cuales lo que más me impresionan son los siguientes:
a) Es el modelo más simple en el que se puede apreciar una transición de fase.
b) Las teorías matemáticas involucradas van desde los procesos estocásticos (azarosos) hasta la teoría de grafos.
c) Sus aplicaciones son muy diversas e importantes en muchos ámbitos de la actividad humana.
Y quizás lo más importante es que uno puede jugar con los modelos con las manos, con lápiz y papel, con piezas de lego, con dados y monedas. Esto es lo que hemos hecho mi amigo Ventura y yo para probar de qué va esto de la percolación. Prometemos aprender a hacerlo con un ordenador para la próxima ;).
Espero que la entrada, que ha quedado un poco larga, le guste a mi amigo Luís F. Rull. Hace ya algunos meses, tomando café, me habló de la percolación que era un tema que yo tenía olvidado. Y después de muchas lecturas y de sorprenderme y maravillarme con el tema, al que nunca le había dedicado tanto tiempo, me he decidido a publicar esta entrada. Muchas gracias, Luís.